SAMUEL

¡Hola! ¿Qué tal? Me llamo Samuel, tengo 6 años y quiero contaros que tengo unos amigos increíbles, se llaman Ali y Alexei y somos inseparables, Ali es marroquí y Alexei es ruso, vinieron a España hace dos años y desde entonces lo hacemos todo juntos, vamos al colegio, jugamos al fútbol, nos quedamos a dormir todos en casa y un montón de cosas más. Sólo hay un problema, no somos muy populares en clase, y eso muchas veces nos pone tristes, nos llaman los “raritos”, no entiendo porque, ¿es qué ellos no tienen amigos con los que querer pasar todo el tiempo? Por más que pienso no encuentro una razón. Por ejemplo, cuando mi amigo Ali sale a la pizarra y tiene que corregir las actividades la gente se ríe porque hay palabras que no sabe pronunciar bien, ¡pero eso es porque todavía es pequeño!, a mi me pasa lo mismo y a muchos de clase también solo que de ellos no se ríen ¿por qué será? Yo no lo comprendo. Lo mismo le pasa a Alexei, cuando estamos jugando al fútbol con los demás chicos siempre le tiran el balón de malas formas, y le dicen algo como “vete a tu país”, y yo siempre digo estos chicos no se enteran, están ciegos, si él es de aquí, ¿a qué país quieren que se vaya? Jeje ¡qué chicos más despistados! ¿Verdad?
Pero un día, me encontré a mis dos mejores amigos llorando, nunca los había visto así, les pregunté que les pasaba y me dijeron que los niños de clase no querían tenerlos cerca, me enfadé mucho. Fui a decirle a los chicos de clase que porque les habían dicho eso y me dijeron que porque eran inmigrantes, ¿inmigrantes? ¿Qué es eso? ¿Eso es malo, están enfermos? Yo les dije que Ali y Alexei eran mis dos mejores amigos y que nadie les iba a hacer daño, los chicos se reían de mí, me dijeron que me fijara en su cara, ¡qué tontos! Jeje, si en su cara hay lo mismo que en la mía, dos ojos, una boca y una nariz. Al final comprendí que no hay más ciego que el que no quiere ver, y ellos precisamente estaban muy, pero que muy ciegos, ¡si eran niños como nosotros! Hoy en día ya estamos en segundo de la ESO y estamos tan unidos como siempre, todavía hoy no entiendo la actitud de aquellos niños ¿por qué sería?