viernes, 21 de noviembre de 2008

"Una historia con mil monos", de Ruth Rocha


He elegido “Una historia con mil monos” de Ruth Rocha porque es uno de los libros que leí de pequeña que me gustaron mucho. Aún no sé porqué me gustó, simplemente cuando me acuerdo de él me trae buenos recuerdos, al igual que otros libros…Es un libro muy cortito donde su historia está basada en pequeño pueblo de Brasil , de donde es su autora, y empieza contándonos que un doctor necesita monos para un experimento y se los pide a un amigo que vive en la selva amazónica a través de un telegrama que dice así:

NECESITO MONOS
PARA EXPERIMENTOS
MANDE 1 Ó 2 MONOS
ABRAZOS
CUARESMA

Imaginaos que puede pasar si el telegrafista escribe mal el telegrama…Pues así sucede y…Ya nos os cuento más, leéroslo y lo descubriréis. Sólo os puedo decir que en esta historia, ¡monos no faltan!

Ruth Rocha nace en Brasil en 1931. Estudió Sociología y política y durante quince años dirigió el departamento de orientación de un centro escolar y colabora en numerosas revistas pedagógicas, de ahí su inquietud por la literatura infantil. Tiene publicados cerca de ochenta libros traducidos en varios idiomas.

Yo sólo me he leído este libro de ella, pero supongo que los demás también serán igual de divertidos. Si queréis conocer algo más de esta escritora brasileña y de sus libros meteros en este enlace:

¡Y eso sí, leeros el libro!

3 comentarios:

Pilar dijo...

¡Hola Adaya!

Me ha gustado tu libro. Me parece que es adecuado para la edad a la que está destinado.

Si es cierto que Ruth Rocha tiene otros cuentos muy divertidos. Te dejo este enlace de otra historia de ella que he encontrado y me ha gustado:

http://www.leemeuncuento.com.ar/rhutrocha.htm

Bss :)

Loli Torrado dijo...

¡Hola Adayita!
Tu libro me ha resultado muy divertido porque es un lío de libro, jeje, me parece muy entretenido, porque cada vez aparecen más monos y el protagonista no consigue deshacerse de ellos. En mi opinión es muy ingenioso y esto gusta a los niños, por lo que lo recomendaría para iniciar a los niños en la lectura.
Saludos.

Bárbara dijo...

Una historia divertida para comprobar qué fácil es malinterpretar las cosas o mejor dicho, las palabras jeje.
MEnos mal que lo que mandaba eran monos, que por lo menos son graciosos, y no serpientes aaaahhhh! xD